We have a story to
tell...
(Please
read this story below the Spanish version)
Creando Nuestra Propia Abundancia
Al igual que muchos niños, crecí viendo a
mis padres batallar financieramente.
Nuestra familia había emigrado a los
Estados Unidos desde el Líbano cuando yo tenía once años. Nos habíamos escapado
de la guerra civil libanesa, donde mi madre y yo habíamos buscado refugio en un
convento durante siete años, viviendo sólo con las necesidades más básicas. Al
ir creado nuestra nueva vida en los Estados Unidos, mis padres trabajaban día y
noche para apoyarnos, a menudo sin suplir sus propias necesidades, de modo que
mi hermano y yo tuviéramos lo suficiente para comer.
Llegué a creer que la lucha era una parte
necesaria de la vida. Crecí y comencé a seguir una carrera en la música, pero
había comprado la idea del "artista
muerto de hambre", con la creencia de que sólo las dificultades
traerían el éxito. Luché durante varios años.
Entonces, un día me quedé tranquilo y
contemplé hacia donde quería que el Universo guiara mi trabajo. Empecé a darme
cuenta de que tenía que crear el tipo de pensamiento y sentimientos que
naturalmente atraen la abundancia -para trascender así a las viejas barreras- y
poder ir tras mis sueños sin tanta lucha.
También me di cuenta de que nunca había
reconocido el dinero como una energía espiritual y que todo se trata de dar y
recibir. Empecé a ver el dinero como parte de nuestra existencia espiritual y
una fuerza positiva en el mundo. He trabajado duro para descubrir los
principios y métodos de la prosperidad, y ser entonces capaz de desarrollar las
herramientas necesarias para prosperar.
Estas me han facultado para crear no sólo una
prosperidad para mí, sino para ayudar a muchos otros en la creación de su
propia prosperidad, que ha sido uno de mis mayores deseos.
Para ayudar a la gente a abrir sus energías
a la prosperidad, he desarrollado cinco fundamentos básicos que se describen en
mi libro “Easy Breezy Prosperity”.
Cada fundamento incluye procesos de prosperidad para todos los días. Al igual
que las herramientas en una caja de herramientas mágica, estos procesos son
divertidos y fáciles de hacer.
He aquí una herramienta increíble que he
aprovechado: el poder de la generosidad.
Con los años, he observado a gente próspera
bien conocida, y descubrí que uno de los ingredientes más poderosos de su éxito
es la generosidad. Filántropos famosos como Oprah Winfrey y Richard Branson
descubrieron hace mucho tiempo la importancia de dar. No es un tipo de "donación ocasional", sino una
generosidad de todos los días y que es a la vez una filosofía de vida y una práctica
espiritual.
Curioso por ver si un dar constante
prosperaría a la persona promedio, decidí probarlo en mí. Comencé lo que he
llamado el Experimento Radical de
Generosidad.
Durante un mes me ofrecí de voluntario una
vez a la semana en el refugio para personas sin hogar, en la preparación sana
de alimentos y pasar tiempo de calidad con quienes no tienen hogar.
Regularmente pagaba por los alimentos o el café de la persona detrás de mí en
la fila. Sacaba a caminar a los perros de mis vecinos ancianos y cortaba el
césped para ellos. Ponía al azar notas bajo el limpiaparabrisas de la gente en
los estacionamientos, diciéndoles lo increíbles que son, e incluía suficiente
dinero en el sobre para una buena cena para dos. Empecé a publicar mensajes inspiradores
diariamente en las redes sociales.
Pronto comencé a ver la generosidad como
una parte natural de mi día.
A los 11 días de mi Experimento Radical de
Generosidad empecé a atraer muchas de las cosas que siempre había querido en la
vida: mejores relaciones con los demás, una profunda satisfacción interior, más
claridad sobre mi trabajo de vida y ¡mayores
oportunidades para prosperar!
Todo parecía fluir naturalmente a mí, sin
que yo tuviera que luchar.
En un momento dado, decidí a hacer una
pausa en el Experimento Radical de Generosidad
durante una semana, sólo para ver los resultados de no dar. En sólo tres días,
me di cuenta de que las cosas no estaban fluyendo con la misma facilidad como
había sido durante el experimento. También me encontré con muchos pensamientos enraizados
de carencia y miedo.
¡Inmediatamente
me sumergí de nuevo en la práctica de la generosidad! Volví pronto a donde estaba, en pleno apogeo, y no sólo
sobreviviendo. Moví la generosidad a la parte superior de mi lista diaria de cosas
por hacer.
Encontré que la generosidad y compasión son
vitales para la prosperidad de cualquier persona, ya sea que demos nuestro talento,
dinero o tiempo.
Con los años, me he dado cuenta del
increíble poder de la generosidad. Es uno de los componentes clave para la
creación de una vida feliz, plena, abundante, y es sólo uno de los poderosos
procesos de prosperidad que me encanta compartir con los demás.
Emmanuel Dagher
Emmanuel Dagher es un humanista
internacionalmente reconocido, especialista en la transformación, curador de la
energía, maestro y autor de éxito. Su nuevo libro “Easy Breezy Prosperity” acaba
de salir, y te recomendamos encarecidamente que le eches un vistazo:
http://go.proctorgallagher.com/e/45802/2016-01-08/2qzpxx/745214729
para aprender más sobre cómo puedes prosperar ¡ahora!
Publicada originalmente
en Internet en Insight Of The Day de Bob Proctor
Adaptación al Español: Graciela
Sepúlveda y Andrés Bermea
Here the
English version…
Creating
Our Own Abundance
Like a lot
of kids, I grew up watching my parents struggle financially.
Our family
had immigrated to the United States from Lebanon when I was eleven. We had
escaped the Lebanese civil war, where my mother and I had sought refuge in a
convent for seven years, living with only the barest necessities. As we created
our new life in the US, my parents worked day and night to support us, often
going without necessities themselves, so that my brother and I would have
enough to eat.
I came to believe
struggle was a necessary part of life. I grew up and began to pursue a career
in music, but I’d bought into the idea of the “starving artist,” believing that only hard times brought success.
I struggled for several years.
Then one
day I got quiet and contemplated where I wanted the Universe to guide me in my
work. I began to realize that I had to create the kinds of thoughts and
feelings that naturally attract abundance—to transcend the old energy blocks—so
that I could pursue my dreams without struggle.
I also saw
that I’d never recognized money as spiritual energy that it’s all about giving
and receiving. I began to see money as part of our spiritual existence, and a
positive force in the world. I worked hard to discover prosperity principles
and methods, and was then able to develop the tools necessary to prosper.
These have
empowered me to not only create prosperity for myself, but to assist many
others in creating their prosperity, which has been one of my greatest desires.
To help
people open their energies to prosperity, I’ve developed five core foundations
that are outlined in my book Easy Breezy
Prosperity. Each foundation includes everyday prosperity processes. Like
tools in a magical toolbox, these processes are fun and simple to do.
Here’s one
amazing tool I’ve tapped into: the power
of generosity.
Over the
years, I’ve observed well-known prosperous people, and discovered that one of
the most powerful ingredients in their success is generosity. Renowned
philanthropists such as Oprah Winfrey and Richard Branson long ago discovered
the importance of giving. Not an “occasional
donation” kind of giving, but a daily living-and-breathing generosity
that’s both a life philosophy and a spiritual practice.
Curious to
see if steady giving would prosper the average person, I decided to try it for
myself. I began what I called the Radical Generosity Experiment.
For one
month, I volunteered once a week at the local homeless shelter, cooking healthy
food and spending quality time with those who were homeless. I regularly paid
for the groceries or coffee of the person behind me in line. I walked my
elderly neighbor’s dogs and mowed her lawn for her. I randomly tucked note
cards under people’s windshield wipers in parking lots, telling them how
amazing they were, and including enough money in the envelope for a nice dinner
for two. I began posting inspiring social media posts daily.
I soon
began to view generosity as a natural part of my day.
About 11
days into my Radical Generosity Experiment, I started to attract many of the things
I had always wanted in life: better relationships, a deep inner contentment,
more clarity about my life work—and even greater opportunities to prosper!
Everything
seemed to just naturally flow to me, without my having to struggle.
At one
point, I decided to pause the Radical Generosity Experiment for one week, just
to see the results of not giving. Within just three days, I noticed things
weren’t flowing as easily as they had been during the experiment. I also found
myself having many thoughts rooted in lack and fear.
I
immediately dove back into practicing generosity again! I was suddenly returned
to where I was thriving, not just surviving. I moved generosity to the top of
my daily to-do list.
I’ve found
generosity and compassion to be vital for anyone’s prosperity, whether we give
of our abilities, money, or time.
Over the
years, I’ve realized the incredible power of generosity. It’s one of the key
components to creating a happy, fulfilling, abundant life, and just one of the
powerful prosperity processes that I love sharing with others.
Emmanuel
Dagher
Emmanuel
Dagher is an internationally recognized humanitarian, transformation
specialist, energy healer, teacher, and bestselling author. His new book EasyBreezy Prosperity just came out this Tuesday, and we highly recommend you check
out: http://go.proctorgallagher.com/e/45802/2016-01-08/2qzpxx/745214729 to learn more about how you can be
prospering now!
Originally
published on Insight OfThe Day
from Bob Proctor