Compilado por Graciela Sepúlveda
Hoy dedicamos este espacio
al dibujante argentino Quino, reconocido como uno de los más destacados
humoristas gráficos del ámbito internacional y que alcanzó la fama con el
personaje de Mafalda, les compartimos la semblanza de este exitoso hombre…
Joaquín
Salvador Lavado Tejón, nació en la región andina de Mendoza, Argentina el 17 de
julio de 1932. Desde su nacimiento se le llamó Quino para distinguirlo de su
tío Joaquín Tejón, quien era un apreciado pintor y diseñador gráfico, y fue gracias
a él, que a la edad de tres años Quino descubrió su vocación.
En
1939 Quino inició la primaria, y como dato chusco fue cuando se dio cuenta que
su verdadero nombre era Joaquín. Desgraciadamente en la década de los 40’s
mueren primero su madre y después su padre.
Al
terminar de estudiar la primaria decidió estudiar en la Escuela de Bellas
Artes, ahí mismo en Mendoza, y por esos
días llega hasta sus manos una revista de Buenos Aires, “Rico Tipo”, publicar en ella es el sueño de Quino.
Los
estudios en esa escuela no lo hacían muy feliz, y finalmente, cansado de
dibujar “ánforas y yesos” la abandonó en 1949 pensando en una sola profesión
posible: dibujante de historietas de humor.
Determinado
firmemente a lograr sus objetivos, a la edad de dieciocho años se trasladó a
Buenos Aires en busca de un editor dispuesto a publicar sus dibujos, recorrió
todas las redacciones de diarios y revistas posibles. Tres semanas más tarde
regresó a Mendoza sin haber podido conseguir trabajo.
En
1953 le tocó hacer el año del servicio militar, esto lo hizo sentir
terriblemente angustiado, de esta época comenta: “Pensaba que nunca iba a salir de allí y tenía ganas de matar a todos,
pero compartir mi vida con muchachos de diferente extracción social… fue una
ruptura muy grande, un enriquecimiento. Empecé a dibujar algo distinto”.
A
partir de 1954 se instaló en Buenos Aires para continuar su deambular por las
redacciones. “Sufrí mucho porque vivía en
condiciones muy precarias. Compartí una pieza de pensión con tres o cuatro
tipos” recuerda de esa época sumamente dura. El semanario "Esto es", de Buenos Aires, le
publica ese mismo año su primera página de Humor Gráfico que se alterna semanalmente
con otro dibujante. “El día que
publicaron mi primera página pasé el momento más feliz de mi vida”.
Afortunadamente
a partir de ese año Quino empezó a ser publicando en diversos medios "Vea
y Lea", "Leoplán", "Damas y Damitas", "TV
Guía", "Usted", "Che", "Panorama", "Atlántida",
"Adán", diario "Democracia", etc. En 1957 Cumple uno de sus
objetivos como dibujante: publicar regularmente en "Rico Tipo".
Desde
entonces y hasta la fecha sus dibujos de humor se vienen publicando
ininterrumpidamente en infinidad de diarios y revistas de América Latina y
Europa.
Con
la popularidad mejoró su situación económica, y en 1960 tuvo la oportunidad de
hacer realidad otro sueño: casarse con Alicia Colombo, nieta de inmigrantes
italianos. Su luna de miel en Brasil fue su primera salida de Argentina, y su
primer contacto con colegas y editoriales extranjeros. Quino y Alicia no
tuvieron hijos.
1963
fue un año fundamental en la vida de Quino, pues publicó su primer libro de recopilación
de chistes gráficos “Mundo Quino” y además
crea la historieta de MAFALDA para
una agencia que quería un personaje que sirviera para el lanzamiento de
productos electrodomésticos llamados Mansfiels,
por lo mismo querían que el nombre del personaje empezara con la letra M, de
ahí Mafalda. Al final la agencia no hizo la campaña, pero Quino se quedó con el
personaje que lo haría famoso.
Mafalda,
la niña de pelo negro, preguntona, inteligente, irónica, inconformista,
preocupada por la paz y los derechos humanos, que odia la sopa y ama a los Beatles,
se publicó por primera vez el 29 de septiembre 1964 (hace 50 años) en el
semanario Primera Plana de Buenos Aires.
A partir del 9 de marzo 1965, en que Mafalda se muda al periódico El Mundo (en el que Quino publica seis
tiras por semana), se inicia el imparable éxito del personaje, que cruza las
fronteras nacionales para conquistar América del Sur y luego se extiende a
Europa.
Más
adelante se recopilaron las tiras de Mafalda para editarlas en libros con un
éxito grandioso, en total se editaron 10 libros, pues Quino decidió el 25 de
junio de 1973 que ya no dibujaría más tiras de la simpática niña, cuando se le
preguntó porque tomó esta decisión contestó: “por qué dejé de hacer Mafalda,
les digo: dejé de dibujarla cuando en la Argentina estaba corriendo sangre y
había una situación política muy peligrosa. Mafalda no podía ignorar los
crímenes que se estaban cometiendo, y si los comentaba, el que no hubiese
podido comentar nada más sería yo. Corríamos riesgo todos". Sin embargo,
el interés por Mafalda se ha mantenido inalterado, de hecho, sus libros
continúan reimprimiéndose y sigue siendo elegida para acompañar diversas
campañas sociales (UNICEF, la Cruz Roja Española, el Ministerio de Relaciones
Exteriores de la República de Argentina, etc.)
Desde
que dejó de dibujar a Mafalda, Quino se entregó a un humor más ácido y negro,
destinado en mayor medida a un público adulto y que ha ido recopilando en su
colección de libros de humor, algunos de ellos son: "¡A mí no me grite!" (1972), "Bien, gracias, ¿y
usted?" (1976), "Ni arte ni parte" (1981), "Gente en su
sitio" (1986), "Potentes, prepotentes e impotentes" (1989),
"Yo no fui" (1994) y "¿Quién anda ahí?" (2012) entre
otros.
Cuando
invitaron a Quino a ser jurado del Festival de Cine Latinoamericano de La
Habana, conoció en Cuba al director de cine de animación Juan Padrón y junto
con él hicieron una serie animada llamada Quinoscopios
basada en los dibujos e ideas de Quino, y años después, Juan Padrón dirigió
diferentes episodios animados de Mafalda así como una película. No cabe duda lo
importante de estar atentos a las oportunidades que se presentan en la vida,
fue un gran hallazgo para Quino haber conocido a este director junto con quien
pudo dar vida animada a sus ya grandes personajes.
Premio Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades |
Quino
ha recibido infinidad de premios, reconocimientos y homenajes por su trabajo
como dibujante y sus libros se han editado y reeditado muchas veces, su
personaje de Mafalda sigue presente en certámenes y festivales de cómic y humor
de numerosos países.
El
2014 fue un año especial, ya que Quino cumplió 60 años en el humor gráfico y
Mafalda cumplió 50 años, por ese motivo varias exposiciones recordaron a
Mafalda en todo el mundo. También ese año recibió en España el Premio Príncipe
de Asturias de Comunicación y Humanidades (este premio se otorga a aquellos que
representan una aportación relevante a la cultura universal) e inauguró la 40a
Feria Internacional del Libro de Buenos Aires.