sábado, 27 de enero de 2018

El Hombre del Bosque...



Compilado por Graciela Sepúlveda

Hoy les quiero platicar de un hombre, quien identificó un gran problema en su comunidad y se abocó a resolverlo, en lugar de solo quejarse, y ahora, 38 años después, logró crear un bosque en el lugar donde no había nada, renovó la flora y la fauna y creó un gran pulmón para oxigenar gran parte de su comunidad, les platico como sucedió todo en la vida de Jadav Payeng…


Jadav Payeng nació en 1963 en Aruna Sapori, en el estado de Assam al noreste de India, es una isla junto al río Brahmaputra, fue el tercero de trece hermanos, sus papás se dedicaban a la venta de leche del ganado que tenían, vivían pobremente, de hecho, después de la inundación que hubo en 1965, la familia de Jadav se mudó al otro lado del río, pero debido a la extrema pobreza lo dejaron a cargo de un juez de la corte del Tribunal de Distrito en Jorhat, quien se ocupó de su educación. Cuando terminó secundaria Jadav dejó la escuela para quedarse con el ganado de sus papás fallecidos y regresó a su tierra natal, el espectáculo que vio le rompió el corazón, la tierra antes verde era ahora solo un banco de arena, las serpientes se arqueaban del calor y morían sin una sombra donde resguardarse, entonces Jadev pidió ayuda a los oficiales forestales para que le ayudaran a plantar árboles, ellos le dijeron que lo hiciera él mismo, así que amigos le regalaron semillas y plantas de bambú y empezó el minucioso proceso de plantar en el banco de arena, esto sucedió en 1979.

En 1980 la División Forestal de Assam inició un plan para reforestar doscientas hectáreas (2 kilómetros cuadrados) de tierra en uno de los bancos de arena del Brahmaputra, conocido entonces como Arun Chapori. Jadav se inscribió para el trabajo y comenzó a plantar árboles para el proyecto. El proyecto finalizó en cinco años, pero Jadav decidió quedarse y, desde entonces, permaneció en Arun Chapori, plantando árboles y cuidándolos con mucho cariño, llegando a crear un bosque en 550 hectáreas, o sea, 5.5 kilómetros cuadrados, ahora llamado Bosque Molai en honor a su creador y cuidador. Jadav obtiene las semillas y retoños del mismo bosque para seguir agrandándolo, la flora y la fauna han regresado y ahora en el bosque Molai viven tigres de bengala, rinocerontes, jabalíes, monos y cerca de 100 ciervos y muchos conejos, además claro que muchas serpientes, quienes fueron la inspiración para tan hermosa labor, también viven ahí muchos tipos de aves y una manada de elefantes llega cada año para quedarse por cuatro o cinco meses. Jadav ahora cuenta con 4 ayudantes para cuidar el bosque y para ahuyentar a los cazadores de rinocerontes, ya que recibe muy poco apoyo del departamento forestal, el piensa en  formar “reservas comunitarias” y organizar campamentos de concientización para protegerse contra los cazadores furtivos y conservar la vida silvestre.

En el período fértil entre abril y junio, él planta el bosque compuesto de muchas y muy diversas especies de plantas como: bambúes, baheda, gambhari, chirimoya, fruta de estrella, framboyán, tamarindo, morera, mango, yaca, ciruela, melocotón, banyan, hierba de elefante y plantas medicinales, la lista es variada y exhaustiva, el resto del año recolecta semillas y retoños.

Jadav vive de lo que gana vendiendo leche de su ganado, está casado y tiene tres hijos, para estar más cerca de la escuela  se mudaron a una localidad cercana, sin embargo, ahora el día de Payeng inicia a las 3 de la mañana para viajar en bicicleta una hora, remar 5 kilómetros y llegar a donde tiene el ganado, ahí limpia el estiércol y lo esparce para fertilizar, ordeña el ganado, después de vender la leche desayuna a las 9 de la mañana y ahora se dirige a su querido bosque para cuidarlo y expandirlo. La historia de Jadav Payeng la conocemos gracias a un fotógrafo de vida silvestre local, Jitu Kalita, quien publicó un artículo sobre él en un diario en 2010. Hoy, Jitu es amigo y mentor de Jadav.

En París, Jadav estuvo presente en el Foro Económico para el Cambio Climático, con representación de más de 200 países, y ahí les hizo la pregunta ¿Qué valor tiene la economía si no hay oxígeno? Y les pidió dejar de respirar 2 minutos para que comprendieran la importancia del oxígeno, y les dijo que si cada uno de los que estaban ahí plantara un árbol se beneficiaría él solamente, pero que si los 2 billones de pobladores del mundo plantaran un árbol cada uno, eso ayudaría a detener el cambio climático, pues aparte de eso, no hay salida.

Por su notable empresa en solitario, la Universidad Jawaharlal Nehru invitó a Payeng en el Día de la Tierra y lo honró con el título de “Hombre del bosque de la India” en 2012.

Más tarde ese año, el entonces presidente APJ Abdul Kalam lo felicitó con un premio en efectivo en Mumbai. El mismo año, estuvo entre los 900 expertos que se reunieron en la séptima conferencia mundial del Foro Internacional para el Desarrollo Sostenible en Evian en Francia. Sanctuary Asia le otorgó el Premio al Servicio de Vida Silvestre. En el 2015 recibió el Padma Shri, el cuarto premio civil más alto en India. Sin embargo, los premios importan poco a este hombre pues al llegar a su bosque recibe el mejor premio de todos, la ovación de todos los árboles y plantas que lo esperan cada día. Jadav comenta: “El Padma Shri es un premio de aliento, pero mi objetivo siempre ha sido hacer el bien para el país. Incluso el presidente de la India tiene que hacer algo por la tierra; de lo contrario, no quedará nadie, no quedará nada.”

Payeng ha sido objeto de diversos documentales que muestran sus logros gracias a su arduo trabajo, el primero lo produjo su amigo y mentor Jitu Kalita en el 2012 y se llama “El Bosque Molai” (The Molai Forest) dura cinco minutos y lo pueden ver en YouTube, otro fue filmado en el 2013 por un cineasta de documentales Hindú, Aarti Shrivastava, se llama “Reforestando la Vida” (Foresting Life), y también en el 2013 se filmó el documental  “El Hombre del Bosque” (Forest Man) el cual obtuvo un premio en el Festival de Cannes en el 2014, este también lo puede ver en YouTube con subtítulos en español. También hay un libro ilustrado para niños llamado “Jadav y el Lugar de Árboles” (Jadav and the Tree-Place) el libro fue publicado por la plataforma de publicación para niños de código abierto StoryWeaver.org donde lo pueden leer y leérselo a los niños, viene en muchos idiomas y es gratuito.

Qué gran lección nos deja Jadav Payeng, la importancia de los árboles y todos sus beneficios, y yo misma lo he experimentado, hace como seis años, cuando nos cambiamos a vivir a esta casa una amiga me plantó un arbusto pequeñito y me dijo, va a crecer como un arbusto más grande, cual va siendo mi sorpresa que ahora es un gran y hermoso árbol, y ya regresó la fauna a mi pequeñito jardín, ahora disfrutamos de mariposas, pájaros, abejas y preciosos colibríes, pues el árbol tiene flores de las que se alimentan estas hermosas creaturas, que labor tan importante ha llevado a cabo Jadav y que exitosa ha sido su vida al lograr reforestar un lugar donde ya no había vida, bravo por Jadav, gracias a su trabajo nos queda la esperanza de que el mundo tiene remedio, y que si todos ponemos nuestro granito de arena podemos gozar de un mundo mejor.


Te invitamos a ver “El Hombre del Bosque” (Forest Man) con subtítulos en Español
(Da Clic sobre la pantalla)